Los legisladores del Palacio Legislativo de la Ciudad de Buenos Aires aprobó con 44 votos a favor, 11 en contra y 1 abstenciones una ley impulsada por el Ejecutivo porteño, mediante la cual se busca b...
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Los legisladores del Palacio Legislativo de la Ciudad de Buenos Aires aprobó con 44 votos a favor, 11 en contra y 1 abstenciones una ley impulsada por el Ejecutivo porteño, mediante la cual se busca bajar el impuesto a los ingresos brutos sobre créditos hipotecarios del 7% actual al 1,5%.
La medida conto con el apoyo del Pro, la CC ARI, PS, el Bloque Peronista y Suma+; mientras que fue rechazado por FpV, CNLM, FIT y Bien Común.
El objetivo primordial de la normativa es el de “disminuir el déficit habitacional estructural, promover el crecimiento económico y el empleo a través de la inversión en viviendas y asimismo fomentar el desarrollo con equidad social a través de la expansión del crédito hipotecario”.
De esta manera, el texto sobre el cual están discutiendo los legisladores afirma que “al abaratamiento del costo del crédito hipotecario dado por la política impulsada por la Nación, la Ciudad agregará un beneficio que redundará en una reducción del 15% para los vecinos de la Ciudad”.
El texto de la ley que los diputados sometieron a consideración, sostiene que “es importante tener en cuenta que el crédito al sector privado en Argentina tiene un bajo nivel de penetración, tanto en una comparación histórica como en relación con otros países de la región” y agrega que “medido como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB), representa actualmente un 14%, claramente por debajo de los niveles que se habían alcanzado previo a la crisis del régimen de la Convertibilidad (22%), y con un rezago aún mayor respecto a la profundidad que alcanza en otros países de la región, donde la media se ubica en el 45% del Producto, y llega a niveles cercanos al 80% en países como Chile, 46% en Brasil o al 40% en economías de menor ingreso per cápita como Paraguay y Bolivia”.
Asimismo, recuerda que “los créditos hipotecarios representan actualmente menos de 1% del Producto, en comparación con 6 puntos, 20 años atrás en nuestro país, y una participación actual de 20% en economías como la de Chile”.
El presidente de la Comisión de Presupuesto y diputado del Pro, Alejandro García, explicó que “estamos acompañando una política nacional, entendiendo que estamos dando respuesta a un reclamo histórico y que tiene que ver con apalear -en la medida de lo posible- el déficit habitacional”.
Por su parte, el legislador de Confianza Pública Marcelo de Pierro aseguró que “es muy importante para los porteños tener acceso a su primera vivienda, pero me ocurrió con este proyecto lo mismo que con el del traspaso de la Justicia, me parece muy poco ambicioso” y recordó que presentó un despacho de minoría en el que propuso “bajar la tasa al 0,5% que fue el monto mínimo y simbólico que pude encontrar”.
“La primera casa es como la primera novia, uno no se la va a olvidar nunca; por eso nosotros tenemos que darles una mano a nuestros vecinos para que puedan acceder a ella”, señaló.
A su turno, la diputada del FIT Laura Marrone advirtió que “esta medida a largo plazo beneficia a los bancos, esta ley la necesitamos urgente porque tenemos 3 millones de familias que necesitan acceder a su primer vivienda; pero no de esta manera, por eso nosotros no lo vamos a acompañar”.
Asimismo, el legislador del FpV José Cruz Campagnoli remarcó que “no estamos en contra de esta línea de créditos, pero si consideramos que tiene un riesgo dado que está atada a la inflación; en el cuadro complejo que se encuentra la Argentina, un crédito hipotecario a largo plazo no garantiza una estabilidad para los porteños, porque nuestra economía es cíclica y se prevé que la recesión se agudice en los próximos meses” y subrayó que “aquí los beneficiarios son los bancos y no los clientes que adquieren el crédito”.
