Revista Qué
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Luego de la aprobación de la creación de la UniCABA, iniciativa aprobada en la Legislatura, que tuvo amplio rechazo de toda comunidad educativa, la noticia del cierre de 14 escuelas nocturnas en la Ciudad provocó un nuevo cimbronazo dentro del mundo educativo porteño.
Esta tarde, hubo un corte de calle en Gaona y Cucha Cucha (Caballito), para protestar contra el cierre de 14 escuelas nocturnas en la Ciudad. En tanto, docentes y directivos nucleados en la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) se reunieron para coordinar los pasos a seguir para resistir la medida del macrismo porteño.
La comunidad educativa responsabiliza al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y a la ministra de Educación, Soledad Acuña, por esta nuevo avanzada contra los colegios nocturnos y ya se prevé un plan de lucha.
En el mismo sentido, la Campaña Argentina por el Derecho a la Educación (CADE), una coalición nacional de organizaciones sociales abogadas al ámbito educativo, emitió un comunicado para expresar su “preocupación y rechazo por la situación generada en torno del anuncio de cierre de las Escuelas Comerciales Nocturnas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
El comunicado fue emitido luego de que se conociera la resolución 2018-4055, mediante la cual el Ministerio de Educación local anunció que 14 liceos y escuelas secundarias comerciales que funcionan en horario nocturno serían cerradas a partir del 2019 y se suprimirían cursos en otros 9 centros similares.
“Este tipo de modalidades educativas está enfocado prioritariamente a dar respuesta a las situaciones complejas de las personas que, queriendo estudiar, concurren en horario nocturno ya que mayoritariamente trabajan o buscan trabajo durante el resto del día. En estas escuelas, jóvenes que son de comunidades más pobres, encuentran un espacio de contención y de identidad que es el que los sostiene en su compromiso por continuar estudiando en condiciones tan duras”, remarcó la CAME.
Y advirtió: “Al cerrarlas, numerosos y numerosas estudiantes ven seriamente comprometidas sus posibilidades de continuar estudiando, más allá de los traslados que se proponen, y, sobre todo, muchxs docentes titulares, interinxs, suplentes y auxiliares docentes, perderán sus puestos de trabajo. Resulta totalmente inaceptable que estas medidas se anuncien intempestivamente, sin ningún diálogo ni consenso con las comunidades educativas, que incluso pudieran abrir la posibilidad de solucionar las dificultades que pudieran existir en dichos establecimientos”.