Un informe deja al descubierto las diferencias existentes en las condiciones de vida de los porteños según las comunas donde residen. Publicado por el Instituto Ciudad, Políticas Públicas para Buenos Aires (I-Ciudad), el revelador trabajo, basado en datos oficiales, desarrolló el primer “Indice de Bienestar Urbano” (IBU) de cada una de las 15 comunas capitalinas.
En diálogo con
Qué, Silvia La Ruffa, una de las responsables del estudio, definió que para los investigadores, el bienestar urbano son “las condiciones, tanto materiales como ambientales, que permiten el desarrollo de los procesos personales y los colectivos”. Y agregó que “esas condiciones son el resultado de la interacción entre la sociedad, el Estado y el mercado”.
Para realizar el informe, el gru-po de investigación se basó en cuatro dimensiones: Desarrollo Económico y Social, Seguridad, Desarrollo Urbano y Ambiente. Desde el espacio advirtieron que les hubiera gustado armar el trabajo por barrios, ya que hay bastante heterogeneidad dentro de cada comuna.
“No es lo mismo Puerto Madero que San Telmo o Constitución”, afirmaron desde I-Ciudad con respecto a las dife-rencias dentro de la comuna 1. Y argumentaron que no se pudo hacer ese de-sagregado porque la información oficial sólo estaba discriminada por comuna y no por barrios.
Uno de los puntos que quisieron dejar en claro los investigadores es que la medición del IBU en cada una de las 15 comunas apunta a un indicador de bienestar y no de calidad de vida o desarrollo humano. Es decir que el estudio privilegia la dimensión social por sobre la individual y jerarquiza el papel del Estado en la articulación de políticas urbanas.
En términos generales, los resultados del IBU mostraron que entre las cinco comunas que ocupan los primeros lu-gares, cuatro de ellas se hallan en la zona norte de la Ciudad (2, 12, 13 y 14). La comuna 6 (Caballito), geográficamente en franja central de la Capital, también mostró indicadores positivos, que la ubicaron tercera en el ranking.
Situadas en las posiciones medias de la medición se encuentran las comunas del oeste (10, 11, 15) más la 3 y la 5. En los últimos lugares, en tanto, quedan las comunas de las áreas central y sur de la Ciudad (1, 4, 7, 8 y 9). Si bien ninguna comuna se posicionó en la banda positiva o muy positiva en cada una de las cuatro categorías analizadas, la 13, formada por los barrios de Belgrano, Núñez y Colegiales, ocupa el primer puesto del Indice de Bienestar Urbano. Allí se observa la mejor relación matrícula escolar por cada 100.000 habitantes comunales, el más bajo nivel de desocupación de la Ciudad y más alto ingreso per cápita del distrito.
En tanto, indicadores relacionados con la seguridad (muertes violentas, robos y hurtos) mostraron tasas muy bajas. Tampoco se registró hacinamiento en esta comuna. Pero el alto costo del metro cuadrado, el alto nivel de conflictividad vecinal y la escasa cantidad de comisarías por habitantes son algunos de sus aspectos negativos.
En el otro extremo del listado de medi-ción del IBU aparece la comuna 4, inte-grada por La Boca, Nueva Pompeya, Barracas y Parque Patricios, ubicados en el sur del territorio porteño. Tiene la más alta tasa de mortalidad infantil y de desocupación, así como una baja matrícula escolar en relación con su población; y el ingreso per cápita de sus habitantes se halla muy por debajo de la banda media.
En esta comuna son negativos los indicadores que miden el acceso a transporte público urbano, el nivel de conflictividad vecinal, la tasa de homicidios y el hacinamiento. En ella, el único valor muy positivo corresponde a la alta cantidad de comisarías con relación al número de habitantes.
Es notorio cómo las comunas del sur porteño, las cuales limitan con el primer cordón del Conurbano bonaerense, arrojaron resultados altamente negativos en materia socioeconómica. Al sur y sudoeste se ubican las cinco con los peores indicadores económicos y sociales.
Se dividen en negativos (1, 7 y 9) y muy negativos (4 y 8). En este caso, el mapa expone una continuidad territorial desde la comuna 1, pasando por la 4, la 7 y finalizando en la 8 y la 9, en el sur de la General Paz. Como particularidad se puede decir que, si bien la comuna 1 tiene resultados cualitativos negativos, es quizás una de las más heterogéneas en su composición interna, dado que contiene barrios diferentes entre sí, como Puerto Madero y Retiro.
Consultada sobre las conclusiones que arrojó el trabajo, Silvia La Ruffa advirtió que “la más importante es que no hay ninguna comuna ideal. Todas tienen algún aspecto negativo, o muy negativo, que requiere de la intervención estatal, incluso del mercado, para poder tener un mejor bienestar urbano”.
La investigadora aclaró que “al pretender formar un ranking para que sea más visible el análisis que hicimos, va a haber algunas comunas que están arriba de todas y otras que aparecen en los últimos puestos, pero eso no quiere decir que todas las primeras co-munas sean perfectas”.
Para ejemplificar lo anterior, La Ruffa indicó que “la comuna que está en primer lugar, que es la 13 (Belgrano, Núñez, Colegiales), tiene entre sus aspectos negativos que es muy alto el precio del metro cuadrado de los inmuebles. Para nosotros, ese es un indicador negativo, porque queremos no solamente una ciudad integrada, sino también una ciudad accesible”.
La comuna 8, compuesta por Villa Soldati, Villa Lugano y Villa Riachuelo, es una de las zonas más castigadas en los indicadores que miden el nivel de desocupación, el acceso a la educación y el in-greso per cápita. Al respecto, Facundo Roma (Unidad Ciudadana), el comunero de la 8, declaró que “Soldati es el barrio de la Ciudad con menos presencia y eficiencia del Estado”.
Roma comentó que es muy notorio en los barrios de esa comuna el nivel de desocupación por el cierre de empresas. “En los últimos meses hubo entre 6 y 8 fábricas que estaban cerrando sin pagarles a los empleados”, aseveró. De hecho, los últimos datos marcan que si bien el promedio de desocupación en CABA ronda el 10%, en zona sur alcanza el 16,9%, contra un 7% de la zona norte.
El comunero agregó que “notamos mucho la crisis con la entrega de mercadería que hacemos una vez por mes. El tema está totalmente desbordado. Había luga-res en las villas donde sólo se entregaba mercadería, y ahora hubo que poner merenderos”.
Por su parte, fuentes del oficialismo destacaron que “el Gobierno de la Ciudad ha instalado un buen operativo en lo que es Bienestar Social, principalmente en las villas. También hay un buen equipo que asiste a las pro-blemáticas climáticas y al tema de cloacas, entre otras cosas”. Además manifestaron que en la comuna 8, la administración de Horacio Rodríguez Larreta puso especial énfasis en la cuestión habitacional, a través del Instituto de la Vivienda (IVC).
Silvia La Ruffa concluyó que “la Ciudad es un distrito amigable para vivir. Porque tiene, en términos de promedio, una mortalidad infantil baja; tiene un nivel de desempleo inferior al nacional; un índice de ingreso per cápita superior al promedio na-cional”. Pero advirtió que, en comparación, “las diferencias entre estas zonas no mejoraron en los últimos diez o doce años de gestión del gobierno del PRO”.
El hecho concreto es que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es el distrito con mayor ingreso por habitante del país. En 2018 tuvo un Presupuesto de más de 222.000 millones de pesos, y este año superará los 320.000 millones. Pese a ello, las desigualdades que pone en evidencia el informe siguen existiendo, y todo hace pensar que van a acentuarse.
Contribuir al debate de políticas públicasDesde el I-Ciudad, el espacio que generó el informe sobre Bienestar Urbano, sostuvieron que “nuestra visión es constituir un ámbito profesional, plural y comprometido con la construcción de una Ciudad económicamente moderna e innovadora, social y culturalmente plural e integradora y ambientalmente sostenible”. Presidido por el dirigente peronista Juan Manuel Olmos, este instituto está compuesto por un equipo interdisciplinario que busca contribuir al debate sobre políticas públicas de la Ciudad a través de la investigación rigurosa, desde una perspectiva de equidad.
Comuna 8: una gran inversión en materia socialHugo Bentivenga es miembro de la Junta Comunal 8. En diálogo con
Qué reconoció que el Gobierno de Larreta “está haciendo una gran inversión con respecto a lo social” en el sur de la Ciudad. “Está creciendo el barrio Papa Francisco y se está urbanizando la villa 20. Se está trabajando e invirtiendo mucho, pero en la zona sur siempre falta más”, añadió el comunero de la Coalición Cívica. En cuanto a seguridad, Bentivenga sostuvo que “se viene trabajando muy bien en lo que es el tema de la cercanía con las comisarías. En ese sentido, el Gobierno, a los comuneros nos escucha mucho. Nosotros siempre le pedimos por la demanda vecinal”. También reconoció que hubo avances en el mantenimiento de espacios verdes, en la recolección de basura y en la limpieza de contenedores.
Mortalidad infantil, con niveles a la bajaSegún datos del Gobierno de la Ciudad, la tasa de mortalidad infantil descendió en 2017 al 6,7 cada mil nacidos vivos, contra 7,2 del año anterior. Los mismos datos evidenciaron el contraste entre norte y sur. En las comunas 2, 6, 13 y 14, la tasa osciló entre 3,7 y 4,7. En las del sur (1, 4 y 8), la tasa indicó que murieron 8,9 niños cada 1.000.
LA NOTA COMPLETA EN LA EDICON #220 DE REVISTA QUÉ