A fines del año pasado, con la ayuda de sus aliados políticos de Evolución, la Legislatura aprobó una ley que declaró innecesario para la gestión del Gobierno porteño el predio de El Dorrego y autorizó la enajenación en subasta pública.
La misma se llevó a cabo días atrás y el predio donde se realizaba la famosa feria Masticar fue adquirido por un privado por US$ 20.100.000. El dueño podrá destinar un 35% de su superficie total (130.000 metros cuadrados) a la construcción de un emprendimiento inmobiliario privado y el 65% restante deberá ser de acceso público con espacio verde.
Según los parámetros que establece el Código Urbanístico, sobre este predio será edificable una superficie de 35.000 m2, de los cuales 5.000 m2 deberán destinarse exclusivamente al desarrollo de la actividad audiovisual, ya que la zona es Distrito Audiovisual también denominado Nuevo Colegiales. A su vez, se cederá por 15 años (renovable) al Gobierno, el uso de 500 m2 construidos.
En tanto, el emprendimiento inmobiliario podrá alcanzar una altura de 31 metros, aproximandamente una torre de 9 o 10 pisos. También estipula el proyecto la construcción de un estacionamiento subterráneo de automotores, con capacidad de hasta 300 unidades.