8 de septiembre de 2022
REINO UNIDO
"Operación London Bridge": cómo es el protocolo estricto tras la muerte de la reina Isabel II
Se trata de un plan de gobierno diseñado hace más de una década, que incluye un megaoperativo de seguridad, discursos oficiales pautados y protocolos para los medios de comunicación.
Este jueves se confirmó la muerte de la reina Isabel II. La monarca británica se convirtió en la más longeva de la historia, estuvo al frente de su reinado más de 70 años, ascendió en 1952 con tan solo 25 años, luego de la muerte de Jorge VI y su sucesor al tono es el príncipe Carlos. Tras su deceso, el Reino Unido puso en marcha el Operativo Puente de Londres, un plan de gobierno planificado desde hace más de una década.
Este estricto protocolo implica el trabajo conjunto de varias áreas del Estado e incluye un megaoperativo de seguridad para controlar la multitud de personas que se acercará a despedir a Elízabeth. A su vez, también proyecta discursos oficiales pautados, la baja de todas las banderas a media asta, periodistas de los medios de comunicación con vestimenta especial, y un apagón de las redes sociales.
El cronograma iniciará el día de la muerte oficial de la reina. Su secretario privado, el honorable Edward Young, transmitirá un mensaje al primer ministro que esté ejerciendo en ese momento, bajo la consigna clara: "El puente de Londres ha caído". En ese entonces, se pondrá en marcha la "Operación London Bridge". En minutos, los gobiernos de fuera del Reino Unido donde la reina es jefe de estado serán informados a través de una línea segura.
En tanto las puertas del Palacio de Buckingham se iluminarán y se colocará un tablón de color negro. Al mismo tiempo, un flash de noticias alertará a los medios de comunicación de todo el mundo, para que cada uno la transmita ante el público. De inmediato, todos los programas de la BBC se detendrán y procederán a emitir un informativo especial, mientras que los periodistas cambiarán su vestuario habitual y se pondrán ropa negra, que está disponible en todo momento en los estudios de noticias. En este marco, el logo de la cadena rojo pasará a ser negro.
El día del deceso será catalogado “Día D” y desde ese entonces, el hijo mayor de la reina, Carlos, se convertirá inmediatamente en rey. Éste dará su primer discurso oficial al día siguiente, mientras el gobierno le hace el juramento oficial en el Palacio St. James. La proclamación del rey Carlos se leerá tanto en el Palacio de St. James como en el Royal Exchange.
A su vez, el Reino Unido decretará nueve días de luto: durante los primeros ocho se realizarán las procesiones ante el féretro, mientras que en el noveno día el Big Ben sonaría su campana a las 9 de la mañana. Dos horas después se daría paso al funeral en la Abadía de Westminster, el cual sería retransmitido mundialmente. El cadáver de la reina quedaría enterrado en el castillo de Windsor.