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No sabía que estaba embarazada y dio a luz en pleno vuelo en un helicóptero
Totalmente increíble, pero real. La joven entró en trabajo de parto y tuvo a su hijo arriba de un helicóptero mientras transcurría el vuelo. Lo más llamativo del caso fue que tenía sus ciclos regulares mes a mes y además no mostraba un vientre visible que indicara que estaba esperando un bebe
El inusual suceso ocurrió en Braintree, Inglaterra, cuando la bebé nació a bordo de un helicóptero, con las 37 semanas de gestación, según DailyMailUK. El caso lo protagonizó una joven británica, quien a sus 19 años tuvo un embarazo críptico, conocido también como embarazo silencioso o sigiloso.
Lo que la joven oriunda de Braintree, Reino Unido, pensó que era una infección de orina terminó siendo su ruptura de fuente. Lo que nunca se imaginó la mujer era que estaba embarazada, ya que sus periodos le habían llegado regularmente y no tenía cambios notorios que dieran cuenta de algo en su panza.
La joven, que viven en la localidad de Braintree dijo que se había realizado seis pruebas de embarazo en los meses previos y que todas salieron negativas. “La vida era muy normal hasta que una mañana me desperté con un chorro de agua gigante”, sostuvo en diálogo con el medio británico Daily Mail.
“Alrededor de 20 minutos después, comenzaron las contracciones y, obviamente, al haber tenido dos partos anteriores, sabía qué era. Llamé a mi suegra y le dije: ‘Necesito ir al hospital, tengo dolor’”. White contó que “estaba en shock” y no sabía qué hacer. “Lo único que hacía era gritar”, continuó narrando los pormenores de su dramático relato.
Se organizó una urgente evacuación en la que un helicóptero estaba programado para recoger a White y llevarla al hospital cercano. Sin embargo, la bebé llegó antes de lo previsto y nació en el vehículo. A pesar de haber afirmado que no deseaba tener más hijos, compartió que su “instinto maternal” se activó de inmediato en el momento del parto inesperado.
Baby Luna nació a las 37 semanas. Debido a complicaciones en el parto durante nueve minutos, fue llevada de urgencia a una unidad de cuidados intensivos neonatales en el Hospital Broomfield, donde se le diagnosticó una encefalopatía hipóxica-isquémica (EHI) leve. Casi diez días después, Faye finalmente pudo llevar a su bebé recién nacido a casa.
Lo que la joven oriunda de Braintree, Reino Unido, pensó que era una infección de orina terminó siendo su ruptura de fuente. Lo que nunca se imaginó la mujer era que estaba embarazada, ya que sus periodos le habían llegado regularmente y no tenía cambios notorios que dieran cuenta de algo en su panza.
La joven, que viven en la localidad de Braintree dijo que se había realizado seis pruebas de embarazo en los meses previos y que todas salieron negativas. “La vida era muy normal hasta que una mañana me desperté con un chorro de agua gigante”, sostuvo en diálogo con el medio británico Daily Mail.
“Alrededor de 20 minutos después, comenzaron las contracciones y, obviamente, al haber tenido dos partos anteriores, sabía qué era. Llamé a mi suegra y le dije: ‘Necesito ir al hospital, tengo dolor’”. White contó que “estaba en shock” y no sabía qué hacer. “Lo único que hacía era gritar”, continuó narrando los pormenores de su dramático relato.