"Cualquiera que me conozca o haya trabajado conmigo sabe que no soy alguien que ofendería intencionadamente, o que haga que alguien se sienta incómodo. Lo lamento y pido perdón a quien se pudo sentir incómodo. Nunca fue mi intención", confesó. La polémica en torno al oscarizado actor de 80 años sale a la luz justo cuando Harvey Weinstein se ha entregado en una comisaría de Nueva York, para ponerse a disposición de la Justicia por los cargos de abusos sexuales levantados contra él. Entre los casos citados está el de una joven asistente de producción que comenzó a trabajar en el verano de 2015 en el plató de la comedia "Going in Style", película protagonizada por Freeman, Michael Caine y Alan Arkin, y según la cual lo que creía el trabajo de sus sueños, derivó en meses de acoso por parte del actor. Además contó que la tocaba repetidamente, y que lo ocurrido la llevó a abandonar la industria del cine. Otros entrevistados tacharon de “tóxico” el ambiente en esa empresa. Según CNN, McCreary fue testigo de algunos incidentes, y a veces blanco de comentarios degradantes por parte de su socio. |